S.O.S ME ESTOY ENAMORANDO

Synopsis

Alberto Muñoz Cano es un joven profesional, serigrafista, que tiene a su cargo el taller de serigrafía familiar, heredado de sus padres y de sus abuelos. Es un taller de gran tradición y prestigio. El lugar de trabajo de la serigrafía comparte el espacio físico con la casa, y ambos, hogar y taller, forman parte de la vida cotidiana de la familia Muñoz Cano: Delia, la madre, Leonor, la cuñada, viuda del hermano gemelo de Alberto, Romina, la hija de Leonor, con problemas congnitivos de nacimiento, Mónica la hermana menor, mujer sexy y atractiva, siempre anda en búsqueda del amor y Vicente, invidente el mejor amigo de Alberto y de la familia. El letrero que está en la entrada del taller, habla por si solo de las caracteristicas de esta hermosa familia: “En este lugar las puertas siempre estarán abiertas para quién las necesite”. Ese es el espíritu de los Muñoz Cano y que lo demuestran día a día y en cada uno de sus acciones. Precisamente por un acto de heroicidad Alberto, conoce a Federico (7 años) a quién salva de las llamas del incendio que esta consumiendo su departamento. Es así como conoce a Sofía, la mamá de Federico. Sofía es sicologa dedica su vida a su trabajo y a su hijo, tiene cierta renuencia al amor, por la mala experiencia que tuvo al casarse con Diego, el padre de Fede. Trabaja en la Fundación Campoamor que da albergue a los padres de bajos recursos que traen a sus hijos, desde lugares apartados para recibir tratamientos médicos ademas de su trabajo en un colegio privado como sicologa de adolecentes. El incendio, que destruyó su departamento, la llevó a regresar a vivir con sus padres.

Sofía y Alberto inician una relación atraídos fuertemente desde el primer momento, ya que ambos tienen valores y principios de vida muy afines. Pero los obstáculos para esta relación no se hacen esperar, la reaparición del padre de Federico, en el momento justo en que Alberto ha solidificado sus lazos con el niño, es apenas el primero de los tropiezos para nuestra historia de amor. También aparece Titi, (experta en manipulación) endilgándole a Alberto el hijo que espera, (de dudosa paternidad) porque siempre ha estado enamorada de él y no quiere dejar pasar la oportunidad de poderse convertir en su esposa, pero Alberto que es un hombre bueno, pero no tonto, reacciona a esto responsabilizándose por el bebé, pero no como pareja de Titi. Sin embargo, para Sofía es un gran problema porque Titi es su amiga. Constantemente la hace sentir muy mal, lo que la hace dudar su relación con Alberto, cosa que hábilmente Omar utiliza, para hacerse indispensable con Sofía. Omar, es el director de la Fundación Campoamor, es un lobo con piel de cordero, ante todos aparenta ser un hombre honesto, enamorado de Sofía, y sin embargo es un tipo siniestro que lo único que desea es poder y dinero. Mato a su esposa haciendole creer a su suegra que lo abandono, además constantemente ordeña a la Fundación. Sera el verdadero rival de Alberto.

 

Sofía, que nunca va a dejar de querer a Alberto, acepta la amistad que Omar le ofrece, a veces por refugio y otras porque Omar, habilmente, se convierte en el hombre que le ayuda a cumplir su sueño: editar un libro sobre Tanatología. Este hecho y el compartir su vocación de ayuda a los necesitados a través de la Fundación, los mantiene casi siempre juntos, lo que se presta para muchos mal entendidos y confusiones con Alberto. Sin embargo, el destino se encarga de volver a juntarlos constantemente sobre todo porque Federico no acepta otro novio de su mamá que no sea Alberto, y porque Romina necesita de su ayuda profesional. Para Alberto, además de no dejar de amarla nunca, Sofía siempre es la persona que lo ayuda a salir de sus problemas más graves, y para Sofía, Alberto es una gran seguridad, sabe que no la va a dejar sola cuando más lo necesita. Por eso mismo estará a su lado haciendola fuerte cuando descubra la triste doble vida de su padre y cuando Omar la envuelve en su última y dramática fechoría.

 

Leopoldo, padre de Sofía es un hombre encantador y seductor, Elsa, su esposa y madre, es una mujer sencilla y dedicada a su hogar, que aún no ha descubierto su talento para escribir. Ambos forman una pareja muy bien avenida que acogieron la llegada de su hija y su nieto con gran amor. La familia que Leopoldo logró formar es a la vista de toda una familia ejemplar, sin embargo, lo que nadie sabe es que Leopoldo tiene una doble vida: formó otra familia con Inés y su hija adolescente, Anita. Leopoldo se las ha ingeniado para que no lo descubran con mil artimañas y cuentos fantasticos que la “cándida” Elsa le cree siempre. Se ha convertido en un encantador y simpático experto de la mentira y hecha mano a mil y un recurso para evitar que lo descubran. Al inicio de nuestra historia todo lo tenía bajo control, hasta que Sofía conoce a Anita porque ingresa a la escuela donde trabaja. La empatía entre ambas surge desde el primer momento, de modo que rapidamente se convierte en una amistad que traspasa el ambito escolar, y trasciende hasta los hogares tanto de Elsa como de Inés, provocándole a Leopoldo grandes conflictos para seguir tapando su doble vida. Entre los recursos que echa mano, involucra a Alberto, quién se rehusa constantemente a cubrirlo, pero termina cediendo trayendole un sin numero de confictos. Leopoldo conoce a Alberto como el héroe que salva a Fede del incendio, como novio de su hija, y como el hombre clave para llevar a cabo un ambicioso plan que le propone Orlando, su socio y amigo, para apropiarse del taller y casa de los Muñoz Cano, para construir en ese lugar un gran consorcio comercial. La coincidencia entre el plan de Orlando y los Muñoz Cano fue una sorpresa para Leopoldo, que lo mantiene con los sentimientos encontrados, porque esta conciente que Orlando idea con engaños, dolo y ventaja un plan para sacar a los Muñoz Cano de su propiedad. Este episodio, que trasciende a todos los personajes y situaciones de nuestra historia hace que los Muñoz Cano esten a punto de verse literalmente en la calle. Finalmente, la balanza se inclina a favor de ellos, pudiendo pagar la gran deuda que pone en jaque la estabilidad familiar gracias a que Delia, cabeza de los Muñoz Cano, siguiendo su gusto por los juegos de azar, compró un billete de lotería y se ganó el premio mayor.

 

Vicente, ciego desde los 19 años, vive con los Muñoz Cano, a partir de que su ex mujer lo dejo. Para Vicente las relaciones humanas no son fáciles, a pesar de que es absolutamente autosuficiente, su carácter amargo y huraño y su personalidad aguda y sarcástica, lo hacen ser de “pocas pulgas”. Laura, la mesera de la cafetería de enfrente del taller logra romperle su coraza y le entrega su corazón. Vicente vive el romance a plenitud hasta que surge la incompatibilidad entre ambos y opta por retirarse sin luchar al fin como el mismo lo dice en repetidas ocasiones, “el amor no existe”. La vida se va a encargar de demostrarle que está equivocado, porque su ex esposa, o Laura no serán los únicos amores en su vida, y al final, sin darse cuenta que siempre estuvo muy cerca de él, le llegara el verdadero amor con Leonor. Pero antes de que esto pase, Leonor, joven y viuda, quién creía que la vida amorosa se había clausurado con la muerte de su marido, despierta la pasión de Dani, un muchacho más joven que ella, trabajador del taller, que con su impetu de juventud la convence de vivir un torrido romance. Para Leonor no es fácil, le tensa la diferencia de edades. Este problema irremediablemente termina por separarlos definitivamente, haciendo que Dani por un lado encuentre el amor en Cecilia, también empleada del taller, y Leonor en Vicente.

Mónica, bella y sensual como es, llama la atención de la mayoría de los hombres, por lo que muchos de ellos se ofrecen a vivir el gran romance que ella espera: la ilusión de casarse y ser feliz, es el motor que rige la vida de Mónica. Sin embargo, tristemente, también es su punto débil, ya que por buscarlo con tanta vehemencia constantemente cae en brazos de hombres equivocados.  Su entrega es tal con cada unos de ellos, que a todos lo considera en algún momento “el amor de su vida”. Por más que la familia intenta hacerle entender su error, no lo logra. Esto le ha valido un fuerte distanciamiento con Alberto, quién al desearle lo mejor, constantemente le está marcando sus errores, y que ella no acepta por nimgún motivo. Pero sus reiterados fracasos no la hacen decaer en su búsqueda: su meta siempre seguirá siendo encontrar al hombre que la haga feliz, sin darse cuenta que esa felicidad nunca se la dará alguien ajeno a ella misma. Cuando logré encontrarse a si misma, también encontrará la felicidad que tanto busca.

La novela transcurre en medio del despertar de Romina a la adolecencia, lo que la ha volcado con todas sus fuerzas en la búsqueda del amor. Romina ve la vida con forma de corazón. Anhela encontrar de quién enamorarse. El problema es que, por su problema congnitivo, que la hace distinta a los demás chicos de su edad, no es tarea fácil para ella. Su belleza de espiritu, su candor y su ingenuidad contrastan con un mundo que rechaza su carácter espontáneo y libre. En muchos aspectos Romina es como una niña envuelta en un cuerpo de mujer y sufre empeñada en ser como los demás, sobre todo en lo que se refiere a la escolaridad; apenas pudo cursar la primaria. Se siente tonta por más que todos en su familia le dicen que su talento es otro. Romina dibuja y pinta con gran maestria, y es en ese ambito donde va a destacar y va a mostrar toda su grandeza. Eso más el amor de Nicolás, que le llegó a la vida tal cual como ella lo esperaba, sintiendo “mariposas revoloteandole el estómago”. Nicolás es un jovencito universitario que la supo “leer con el corazón”, y que entiende perfectamente su manera de ser, y se enamora sinceramente de ella. Juntos van a enfrentar las alegrías y los sinsabores del amor adolecente, que, en el caso especial de Romina, va a tener momentos muy drámaticos y dolorosos.

Cada una de las situaciones que traen consigo los encantadores y complejos personajes de nuestra novela, tendrán un desenlace feliz, manteniéndose siempre y por sobre todas las cosas los buenos valores que desde un principio están demostrados por la historia de la familia Muñoz Cano.

Format

Telenovela

98 x 60'

Melodrama

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Characters

Sofía Fernández - More

Alberto Muñoz Cano - More

Leopoldo Fernández - More

Vicente Ramos Bautista - More

Omar Kattan - More